miércoles, 25 de mayo de 2011

Hijo de la noche...

 

Soy un alma que al nacer vi la luz, la vida y la felicidad
Pero según la vida pasa todo lo bello perdí
Vi la pobreza, vi el sufrimiento y ahora veo la muerte
Hasta que he evolucionado a lo que ahora soy yo

Hijo de la noche, guardián de las sombras
Enamorado de la niebla y de la Luna hermosa 
Tan solo con mi orgullo, mi fuerza y sabiduría
Pues en la tierra nada me queda ya

Muevo mis alas negras al compás con el frío viento 
Vuelo solemne a pesar de tiempos violentos
Tiempos de soledad, tristeza y un poco mas solo
En un combate diario contra todo

Soy un Ángel caído del cielo, mi voz es un lamento,
Que a mis sentimientos por la Luna me aferro
Aun así soy dueño de las noches
Donde las estrellas y el firmamento lloran serenas mi derrota
.

miércoles, 18 de mayo de 2011

Mi Soledad... sin tu voz

 

Mi soledad es mi equipaje
En este inhabitado paraje de la noche
En que la ausencia de tu voz
Es como espinas que se clavan
Dentro del corazón

Desencadenan vínculos de tristeza
Que diluvia interminable
En gotas de inquietud
De una razón de ser
Que se escarpa en el averno
Bajo la atenta mirada de la luna

La luna refleja mis ojos
La mirada caída
El alma con un vacío…
El universo es lejano:
En que lento y eterno
Mi mundo se derrumba.

Mi soledad es mi equipaje
En esta noche oscura de destierro.
 
Te echo de menos....No es lo mismo sin ti, sin tu voz...

miércoles, 11 de mayo de 2011

Vampiro enamorado....



Desangrándose están las venas de la bruja...
Su sangre da la vida al vampiro...
Que en un siniestro jardín su cuerpo reposa,
Porque dice ser hijo de la niebla...
Y portador del desnutrido desamor de odisea.

Entre su pecho existe un lugar vacío
Y sin palpito...es el ama que no tiene corazón,
Es el cadáver del vampiro lleno de rabia y cólera.
Enamorado de la bruja...sintiendo que ella se desangra...

Los ojos rojos del vampiro hipnotizan a la bruja
es la mujer que ama con locura,
sus afilados colmillos de marfil se clavan
E eterniza la muerte en vida de su bruja amada.

No tienen vida sus cuerpos,
pero hay un gran amor en sus rostros,
no hay cruces ni ajos en su entorno
solo hay ataúdes y la oscuridad absoluta,
en un perpetuo idilio lleno de sombras.